China reduce los aranceles finales al porcino europeo y España se sitúa en el rango más bajo

El Ministerio de Comercio de China ha anunciado este martes los aranceles definitivos sobre el porcino europeo tras la investigación antidumping iniciada en 2024. A pesar de que estarán en vigor durante cinco años, la ventaja para España es que se sitúa en el tramo más bajo.

En concreto, las tasas definitivas se sitúan en el 4,98% para la española Litera Meat, el 18,68% para la danesa Danish Crown y el 19,8% para la holandesa Vion. Asimismo, a las empresas consideradas cooperantes —entre ellas la mayoría de las españolas— se les aplicará un arancel del 9,8%, lo que supone una reducción del 50% respecto al gravamen provisional vigente hasta ahora.

Hay que tener en cuenta que estos gravámenes, que empezarán a aplicarse este miércoles 17 de diciembre, son sensiblemente inferiores a los de hasta un 62,4% que había anunciado contra el porcino europeo de manera temporal el pasado mes de septiembre.

La Interprofesional Agroalimentaria del Porcino de Capa Blanca (Interporc) señala que esta reducción, especialmente significativa para las empresas españolas, es resultado de la “intensa cooperación técnica y diplomática mantenida con las autoridades chinas”.

Así, tanto Interporc como las empresas españolas exportadoras han colaborado de forma activa y transparente y han mantenido un estrecho contacto durante este tiempo con las administraciones china y española en un contexto internacional complejo, marcado por la necesidad de garantizar relaciones comerciales basadas en el diálogo, el rigor técnico y el respeto a las normas internacionales.

Paralelamente, el director general de la Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (Anice), Giuseppe Aloisio, ha declarado para Efeagro: "No me voy a conformar con que hemos pasado de un 20 a un 9,8 %", entre otros motivos porque "a la mayoría de las de las demás empresas que partían de un 62 le han le han igualado al 9,8".

Desde su punto de vista, penaliza a un sector que ha sido "ejemplar en todo" y rechaza que "las tensiones comerciales se trasladen a los alimentos", ya que "con las cosas del comer no se debería jugar". En cualquier caso, se ha mostrado confiado en que el diálogo entre la UE y China permita corregir esta situación para mejorar la situación del sector que, además, "está afrontando al mismo tiempo una crisis sanitaria", ha explicado en referencia a la reaparición de la peste porcina africana hace tres semanas en Barcelona.